Lo de ir al gimnasio se puede convertir en una tarea muy complicada si no nos organizamos. Por mucha fuerza de voluntad que tengamos, al final los planes no salen como esperábamos y quizá pasen días sin que vayamos. O quizá vamos y lo hacemos a una hora en la que no obtenemos los mejores resultados o nos encontramos con que la situación dentro del centro no es la más conveniente.
Los expertos coinciden en una respuesta muy concreta sobre cuándo es el mejor horario para ir al gimnasio: por la mañana. Eso sí, no es recomendable que esa sea tu elección en el caso en el que hayas desayunado demasiado fuerte. Tampoco deberías ir al gimnasio sin tomar nada por la mañana en el desayuno, puesto que necesitarás energía para poder realizar tu actividad. Pero intenta que no sea un gran desayuno, sino más bien algo ligero que puedas comer sin más consecuencias.
De todas formas, algo en lo que también coinciden los especialistas es en la importancia de que mantengamos una regularidad y que recordemos que no es necesario ir al gimnasio todos los días de la semana. En realidad, se recuerda que 30 minutos de ejercicio al día que podríamos hacer incluso volviendo de la oficina, serían necesarios para mantener una buena actividad deportiva al día. Por ello, si no encuentras la manera de ir al gimnasio todos los días, no tendrías que agobiarte por ello y acabar yendo en mala hora.
Por otra parte, por todo lo que te hemos comentado en este texto, no es recomendable que vayas a la hora de comer. Ni antes ni después. Si vas después, lo que te encontrarás será una gran cantidad de personas, puesto que suele ser habitual ir al gimnasio en la hora de la comida. Y si ya has comido, te sentirás mal haciendo deporte justo después.
