Si tomamos cafeína normalmente es, para qué nos vamos a engañar, por el impulso de energía que proporciona. Si bien todos disfrutamos del café, no obviamos que uno de los motivos de su consumo es tener esa capacidad que nos proporciona para estar más despiertos y rendir mejor. Por lo tanto, si queremos aprovechar al máximo la cafeína, lo mejor es saber cuándo resulta más adecuado tomarla.
Aunque puede haber situaciones específicas dependiendo de tu horario de trabajo o de tus propias cualidades, hay una serie de recomendaciones claras que se suelen aplicar de forma general. Por ejemplo, esto incluye tomar las dosis de cafeína por la mañana. Es una manera ideal de despertarnos si nos cuesta comenzar a trabajar por la mañana.
Otro buen momento en el que tomar cafeína es al mediodía, después de la comida. Lo que te produce la comida es que te sientas dormido, de ahí que sea una tradición echarse la siesta. Desgraciadamente, no siempre es posible dormir un ratito, por lo que necesitas suplir ese problema de otra manera. Tomarse un café u otra bebida con cafeína acaba siendo la mejor solución.
En último lugar, a primera hora de la tarde también es recomendable confiar en la cafeína. Esta es la mejor manera de poder terminar las tareas que todavía tienes pendientes en el trabajo y que requieren tu máxima atención. No es recomendable que alargues este café demasiado, por lo que tómalo entre las 16:00 y las 17;00 horas como tarde.
Recuerda que, por otro lado, lo que deberías hacer en la práctica mayoría de los casos es evitar la cafeína por la noche. Eso no suele ser recomendable debido a que podría afectar a tus patrones de sueño y descanso. Salvo que tengas que trabajar por la noche, evita la cafeína y déjala para la mañana siguiente.