Si estás intentando bajar de peso, es posible que hayas entrado en un círculo vicioso de pesarte cada vez que tienes la oportunidad. Pero lo cierto es que no es una buena idea. Los expertos recomiendan que evites obsesionarte con controlar tu peso y que establezcas un horario para que no se acabe convirtiendo en un problema para ti.
Dicho esto, hay un momento exacto del día en el que es mejor pesarse. Se trata del momento en el que te acabas de despertar. Por lo tanto, la mejor hora para pesarse será por la mañana muy pronto. Si te despiertas a las 7, pésate después de levantarte de la cama. Si te levantas a las 8, haz lo mismo, o a las 9. No importa la hora a la que te despiertes, sino que te peses cuando haga poco que te has despertado.
El motivo de ello es que es entonces cuando el cuerpo se encuentra en un estado más neutral en lo referente a tu peso. Ten en cuenta que no tienes comida en el estómago ni nada que pueda afectar a los resultados que veas en la báscula cuando te subas en ella.
Además, cuando te despiertes, el cuerpo habrá tenido tiempo suficiente para digerir todos los alimentos de la noche, absorber sus partículas positivas y desechar aquello que no sea útil. Todo el procesamiento de comida y bebida del día anterior se habrá realizado de la mejor manera posible y tu cuerpo estará en posición de darte información sobre tu peso con total precisión.
Lo único que debes tener en cuenta es que, si has comenzado a pesarte por la mañana a primera hora, luego será recomendable que evites mirar el peso de nuevo.
